Es de vital importancia saber reconocer un golpe de calor en verano para que no llegue a males mayores ya que con las altas temperaturas que estamos viviendo es bastante común entre la población, siendo los grupos de riesgo los niños y mayores de 65 años, las personas con actividades físicas intensas así como los enfermos crónicos o que siguen un tratamiento con medicamentos.
Pero, ¿qué es un golpe de calor?. Es una respuesta del organismo a un sobrecalentamiento del mismo. El cuerpo sufre la temperatura exterior como nosotros y, así como nos resulta complicado combatir el calor en verano, al cuerpo humano le sucede lo mismo.
Su mecanismo de defensa es bombear los líquidos del organismo hacia los órganos vitales, provocando una deshidratación general.
Por eso, entre los síntomas más comunes de un golpe de calor destacan los siguientes:
- Orinar escasamente
- Hiperventilación
- Sequedad y enrojecimiento de la piel
- Palpitaciones frecuentes
- Calambres
- Palpitaciones frecuentes
- Orinar escasamente
- Debilidad y mareo constante
Cómo combatir un golpe de calor en verano
Lo prioritario es conseguir bajar la temperatura corporal así como devolver los niveles de líquidos necesarios para que el organismo se recupere y todo vuelva a la normalidad.
Para ello, es conveniente seguir los siguientes pasos:
- Trasladar a la persona afectada a un lugar fresco, seco, a la sombra y con ventilación
- Quitarle toda la ropa que pueda oprimirle el cuerpo ya que es importante que consiga respirar sin dificultad
- Proporcionarle agua que deberá beber en sorbos pequeños y pausadamente para que poco a poco vuelva a hidratarse
- Aplicar gasas o telas mojadas por la frente, vientre, cuello y muñecas para bajar la temperatura corporal
En caso de que los síntomas no cesen, lo mejor es trasladar a la persona al centro de salud más cercano
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